¿Cómo se reconocen los cólicos en los bebés?
Los cólicos en los bebés pueden resultar bastante angustiantes, tanto para el bebé como para sus padres. Es fundamental saber reconocer los calambres. Los síntomas del cólico incluyen:
- Ataques de llanto: El llanto es la expresión más común de malestar en los bebés con cólicos. Este llanto puede ser fuerte e inconsolable.
- Estiramiento excesivo: los bebés con cólicos tienden a extenderse demasiado, arquear la espalda y tirar de las piernas hacia el estómago.
- Comportamiento inquieto: Los bebés con cólicos suelen estar inquietos, tienen dificultades para conciliar el sueño y relajarse.
- Quejas abdominales: los bebés pueden experimentar dolor en la zona abdominal, que se manifiesta en tensión de los músculos abdominales.
Posibles causas de los calambres.
Comprender las posibles causas de los cólicos es el primer paso hacia el alivio. Las causas de los cólicos pueden variar e incluir:
- Hipersensibilidad o alergia a determinadas leches en polvo para bebés: algunos bebés tienen dificultades para digerir determinadas leches en polvo, como la alergia a la leche de vaca o la intolerancia a la lactosa.
- Tragar aire: los bebés pueden tragar aire mientras beben, lo que provoca la formación de gases en los intestinos.
- Estreñimiento: El estreñimiento puede causar molestias y dolor en los bebés.
- Reflujo: El reflujo, en el que el ácido del estómago regresa al esófago, puede provocar malestar y llanto.
- Infección viral: una infección viral puede alterar la digestión del bebé.
- Sobrealimentación: Dar demasiada comida en un día o a la vez puede provocar problemas digestivos.
- Maduración del tracto gastrointestinal: los intestinos de los recién nacidos necesitan acostumbrarse a la comida real, lo que puede provocar gases y cólicos.
- Aire: Tragar aire mientras se bebe puede ser causa de cólicos, especialmente en bebés voraces.
- Estímulos: Demasiada estimulación puede provocar dolor de estómago, especialmente en bebés sensibles.
- Alergia (a la leche de vaca): en algunos casos, las molestias abdominales pueden deberse a una hipersensibilidad o una intolerancia alimentaria, como por ejemplo la alergia a la leche de vaca.
- Nutrición: El tipo de nutrición que recibe el bebé puede influir en el nivel de los síntomas, ya sea lactancia materna o biberón.
Consejos para padres con bebés con cólicos
Los padres no quieren nada más que consolar y brindar alivio a sus bebés. Por ello, hemos enumerado consejos prácticos que pueden ayudar a reducir los calambres:
- Asegúrese de que su bebé eructe adecuadamente: Eructar adecuadamente después de beber un biberón puede ayudar a eliminar el aire del estómago y reducir los gases.
- Baño: Un baño tibio puede resultar relajante para el bebé y ayudar a aliviar las molestias.
- Envolver o usar una toalla: Envolver al bebé en una toalla o envolverlo puede crear una sensación de seguridad, lo que puede ayudar a calmar los cólicos.
- Masajee suavemente su vientre: Masajee el vientre del bebé con las manos tibias con movimientos circulares suaves. Esto puede ayudar a reducir la tensión en el abdomen.
Consejos para reducir los calambres estomacales de tu bebé
No tiene que mirar impotente cómo su bebé lucha contra los cólicos. Aquí hay algunos consejos que puede intentar para brindar alivio:
- Coloque una bolsa de huesos de cereza sobre su estómago:
- El calor de una bolsa de huesos de cereza puede ayudar a que su bebé se relaje y le cause menos molestias. Un baño tibio puede tener el mismo efecto.
- Masajee suavemente su abdomen:
- Masajee el vientre de su bebé con manos cálidas con movimientos circulares suaves para liberar la tensión de los músculos abdominales y aliviar las molestias. Esto no sólo puede ayudar a reducir los cólicos, sino que también crea un agradable momento de contacto físico entre usted y su bebé.
- Pedalear con las piernas en el aire:
- Este movimiento suave puede romper la tensión en los músculos abdominales y ayudar a relajar el abdomen.
- Distracción con sonido y movimiento:
- Cántele una canción relajante a su bebé, mézalo suavemente hacia adelante y hacia atrás o dé un paseo corto en auto. Los movimientos relajantes y el sonido de su voz pueden ayudar a calmar a su bebé.
- Envolver:
- Envolverlo puede ayudar a crear un ambiente seguro y protegido para su bebé. Esto le ayudará a relajarse y, con suerte, a dormir bien por la noche.
- En el portabebés o portabebés:
- Lleva a tu bebé en un portabebés o portabebés y da un paseo tranquilo. El calor de su cuerpo, los latidos de su corazón y los movimientos de balanceo pueden calmar a su bebé.
- Una buena actitud:
- Pruebe diferentes posiciones hasta que su bebé se sienta más cómodo. A algunos bebés con cólicos les gusta acostarse con el estómago sobre el antebrazo, sosteniendo la parte inferior del abdomen. Una posición flexionada, como la posición fetal, también puede resultar cómoda.
- Evite el té de hinojo o el té de anís:
- Aunque en el pasado a veces se recomendaba el té de hinojo o el té de anís para los cólicos, no es aconsejable dárselos a su bebé, ya que pueden contener toxinas vegetales dañinas.
Medicamentos y ayudas
A veces se puede considerar la posibilidad de tomar medicamentos para aliviar los calambres. Hay varios productos disponibles en farmacias y droguerías que afirman ayudar con los cólicos intestinales, como Sab Simplex, Cinababy, Infacol y ABC Dophilus. Aunque no existe evidencia científica convincente de que estos medicamentos sean siempre efectivos, se conocen efectos positivos entre los usuarios. Sin embargo, se recomienda utilizar dichos productos sólo después de consultar con un pediatra y/o un consultor de la clínica de salud infantil.
¿Cuándo acudir al médico por calambres abdominales?
Los cólicos intestinales por sí solos no son motivo para acudir al médico, porque no son perjudiciales para el bebé. Sin embargo, si tienes dudas o crees que puede haber otras causas para el llanto persistente de tu bebé, lo mejor es que contactes con tu médico. Es recomendable consultar a un médico, especialmente si hay otros síntomas como fiebre, vómitos o sangre en las heces.
Es importante recordar que, en la mayoría de los casos, los cólicos desaparecen por sí solos al cabo de unos meses. Con el cuidado adecuado, paciencia y estos útiles consejos, los padres pueden ayudar a sus bebés a superar esta fase desafiante y crecer juntos en su relación entre padres e hijos. El amor y la atención que le brindas a tu pequeño es siempre una fuente de consuelo y apoyo durante este tiempo.